Muchas de las personas que acuden a la consulta, refieren la sensación de ir adquiriendo más volumen abdominal conforme avanza el día. Sienten que se levantan con el vientre casi plano y a lo largo del día van notando como éste va aumentando de volumen, sensación de hinchazón, a pesar muchas veces de no haber hecho ninguna comida copiosa. ¿Has sentido esta sensación con cierta frecuencia? En este post te daremos algunas ideas para poder mejorar ese vientre hinchado.
¿Cuál puede ser la causa de esa hinchazón?
Aunque es una molestia que puede darse tanto en hombres como en mujeres, es cierto que son estas últimas las que con más frecuencia lo comentan. En primer lugar sería necesario acudir al médico para poder descartar alguna patología asociada a dicha sensación. En la mayoría de los casos, no va a existir ninguna patología grave, y con ciertos cambios o pautas saludables se puede mejorar. Pero conviene descartar alguna de las causas que pueden provocar esta distensión, como pueden ser: acumulación de líquidos en el abdomen (puede ser un problema grave de salud), síndrome de intestino irritable, intolerancia a la lactosa, oclusión intestinal, quistes ováricos, síndrome premenstrual o miomas uterinos entre otros.
5 trucos sencillos para disminuir ese vientre hinchado
Una vez descartado todo lo citado anteriormente, te proponemos algunas ideas para que puedas ir probando y valores tu mism@ si notas mejoría. Estos consejos van a ir encaminados a solucionar el estreñimiento si es tu caso, mejorar la microbiota intestinal, de la que hablaremos más adelante por la importancia que va adquiriendo conforme se va estudiando más y evitar la acumulación de aire intestinal como consecuencia de la ingestión de ciertos alimentos. Todo ello mejorará esa sensación de hinchazón.
En primer lugar te aconsejamos que practiques técnicas de alimentación consciente y observes la velocidad a la que comes. Muchas veces, por nuestro ritmo de vida, y por el nivel de estrés que acumulamos a lo largo del día, comemos a una velocidad mucho más rápida de la aconsejada y esto puede hacer que la deglución de aire a la vez que comemos sea excesiva y por tanto tendamos a acumular mucho aire. Esto puede ocurrir también si tenemos la costumbre de masticar chicles.
Te recomendamos que intentes comer más despacio, con algún pequeño truco como puede ser dejar los cubiertos en el plato cada vez que tomes un bocado o te acostumbres a masticar más veces cada bocado. Del mismo modo, sería aconsejable aprender técnicas de relajación para poder sobrellevar ese estrés diario.
Coge el hábito de tomar en ayunas un vaso de agua templada con el zumo de medio limón e incorpora a tu desayuno una cucharada sopera de semillas de lino. A ser posible, tómalas disueltas en agua después de haberlas dejado en reposo unas cuantas horas. De estas semillas también hablaremos en otros post por la cantidad de propiedades beneficiosas que tienen para nuestro organismo. Ya sabes que nuestro lema en nutrir tu salud. Ambas opciones son una manera natural de regular tu estreñimiento. Es muy importante que lo incorpores como un hábito y no como algo que hagas ocasionalmente.
En cuanto a la alimentación, te recomendamos una alimentación lo más natural posible, evitando o eliminando los alimentos procesados. Incluye siempre en tu dieta diaria frutas y verduras (evitando aquellas que producen más aires como el brócoli, repollo, coliflor, alcachofa, pepino y cebolla) y consume también grasas saludables (aguacate, aceitunas, frutos secos, semillas y proteína animal). Así mismo, puedes probar a eliminar de tu dieta, durante una semana, el gluten y los productos lácteos. Pasada esta semana, prueba a introducirlos de manera progresiva.
Cuida tu microbiota intestinal. Tanto los probióticos como los prebióticos son grandes aliados de nuestra microbiota, muchas veces alterada por numerosas causas como el uso de antibióticos, el estrés o una incorrecta alimentación. Todo esto da lugar a una disbiosis en las bacterias que habitan en nuestro intestino.
Por último, pero no por ello menos importante, realiza ejercicio físico, al menos durante 45 minutos diarios. Cada persona puede incorporar de una manera u otra algo de actividad física en su rutina diaria.
Esperamos que todos estos sencillos consejos te puedan servir de ayuda.
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