EL TEJIDO ADIPOSO: ¿ENEMIGO SILENCIOSO?

¿Quieres saber cómo perder un kilo de grasa?,

¿Qué tipos de grasa hay en tu cuerpo?,

¿Si puedes elegir en qué parte de tu cuerpo de puede localizar ?

Estas y otras muchas cuestiones sobre nuestro tejido graso en este post, toma nota de ello.

El tejido adiposo o tejido graso es el tejido de origen mesenquimal (un tipo de tejido conjuntivo) conformado por la asociación de células que acumulan lípidos en su citoplasma: los adipocitos.

El tejido adiposo, por un lado cumple funciones mecánicas: una de ellas es servir como amortiguador, protegiendo y manteniendo en su lugar los órganos internos así como a otras estructuras más externas del cuerpo, pero también tiene funciones asociadas al aislamiento térmico, la protección mecánica y la termorregulación, así como en la regulación endocrina a través de síntesis de hormonas especificas (adipocina) implicadas en importantes funciones fisiológicas, como la inflamación, el apetito, la diferenciación celular, el metabolismo celular etc. y es el encargado de generar grasas para el organismo.

¿QUÉ SON LA GRASA BLANCA Y LA GRASA PARDA?

El tejido adiposo se presenta en dos formas. Tejido adiposo blanco (TAB) y pardo (TAP). Las cuales colaboran en el metabolismo energético de forma conjunta, aunque presenta deferencias anátomicas y funcionales. Un tipo mixto o grasa “beige” también podría coexistir integrado con la grasa blanca.

La grasa blanca suele presentarse como una única masa de lípidos (triglicéridos), es decir, con conformación unilocular, mientras que la grasa parda se dispone en multitud de pequeñas gotas de grasa o de forma multilocular. Además, la grasa parda contiene generalmente una menos proporción de material lipídico (30-40%) que la grasa blanca (70-80%).

El tejido adiposo pardo se localiza en el ser humano en regiones axilares, cervicales, intercostales e inguinales, siendo más abundante en el periodo perinatal que en la edad adulta, mientras que la grasa blanca tiende a acumularse con la edad bajo la piel y el tronco.

La función primaria del TAB consiste en acumular energía para su utilización dependiendo de diversas situaciones metabólicas, lo que contrasta con el TAP ya que éste participa activamente en procesos de termogénesis inducida por la temperatura y por la dieta, aumentando la producción de calor en detrimento de la formación de ATP.

EL ADIPOCITO: granero de grasa

Aunque nos parezca flácida e inerte, la grasa corporal es una entidad muy viva: el cuerpo de un hombre de 60 kilos contiene unos 10 kilos de ella, o sea. veinticinco mil millones de células llamadas adipocitos.

El adipocito, que confiere sus características al tejido adiposo es una célula grande cuya función es almacenar lípidos, en concreto triglicéridos y colesterol esterificado, como reserva energética, que representan un 80% de su volumen total; es pues, un verdaderogranero de grasa”.

Cuando se come demasiado, el tamaño de los adipocitos y por tanto, el peso, aumentan otro tanto y nos lleva a engordar. Durante un régimen o cuando se hace deporte, el adipocito libera sus reservas, las grasas abandonan el adipocito para unirse con otras células, donde son utilizadas como carburante energético entonces, el volumen del adipocito disminuye y se adelgaza.

Hace años se pensaba que el desarrollo del tejido adiposo dependía de determinados periodos de la vida de una persona, durante los cuales el número de adipocitos aumentaba rápidamente: los meses alrededor del nacimiento, así como la adolescencia. Según como crezcan los adipocitos hablaremos de:

-Hiperplasia: si aumentan en número.

-Hiperteofia: si aumentan en tamaño sin multiplicarse.

Pero en realidad la proliferación de adipocitos puede desarrollarse durante toda la vida, así durante el embarazo aumentan en tamaño, pero también en número. Si se come demasiado y sea cual sea la edad, los adipocitos aumentan de tamaño (hipertrofia) y luego de número (hiperplasia).

En caso de adelgazamiento, el tamaño de los adipocitos disminuye, pero su número casi nunca. Incluso después de una operación quirúrgica para extraer el tejido adiposo, puede ser seguida de la proliferación de los adipocitos . Como si el organismo retuviera en la memoria un número preciso de adocitos y tratara por todos los medios de mantenerlos. Esto puede explicar en cierta medida, la dificultad que se tiene a veces de mantener el peso después de haber adelgazado.

HORMONAS Y ADIPOCITOS

Dos hormonas juegan un papel importante y opuesto sobre los adipocitos: la insulina y la adrenalina.

Secretada por el páncreas después de una comida; la insulina favorece el almacenamiento de las calorías de la comida en forma de grasa y estimula el crecimiento de los adipocitos.

Al contrario, cuando se ayuna, las glándulas suprarrenales producen adrenalina; ésta ocasiona una liberación de grasas por los adipocitos situados en el vientre.

Comparando los adipocitos de personas robustas con los de personas que están delgadas, se encuentran ciertas diferencias metabólicas, pero no parece que estén ligadas a una particularidad de origen genético; sino que provienen más bien del entorno que rodea al individuo y a sus adipocitos (alimentación, ejercicio, hormonas). Los adipocitos de una persona obesa son más grandes que los de un individuo delgado, pero su metabolismo no es fundamentalmente diferente.

Otras hormonas y adipocinas sintetizadas en el tejido adiposo como la leptina pueden intervenir directamente o indirectamente a través de neuropéptidos en la regulación del apetito y la saciedad o el metabolismo energético.

TEJIDO GRASO SEGÚN EL SEXO

En lo que respecta al tejido adiposo, la igualdad de sexos es una quimera.

Diferencias de la grasa según el sexo:

Por la cantidad de tejido: la grasa corporal de un hombre de peso normal se eleva a un 15 % del peso corporal, frente al 25% de la mujer… ¿Qué quiere decir esto?, pues que ésta mujer es,… más grasa.

Por su localización: en la mujer la grasa se sitúa sobre todo en la parte baja del cuerpo, vientre, nalgas, caderas y muslos están cubiertos con un colchón adiposo, verdadero signo sexual distintivo. En el hombre, ocurre lo contrario tiende a concentrarse en la parte alta del cuerpo: nuca, cuello, hombros, tórax y parte del abdomen situado por encima del ombligo.

Grasa abdominal

Se habla así de obesidad androide para el hombre y ginoide para la mujer, o lo que algunos traducen poéticamente asemejando a una manzana la silueta del hombre obeso y a una pera la de la mujer obesa. En otros, la silueta no es ni verdaderamente ginoide ni androide sino más bien mixta.

Se sabe que el exceso de grasa corporal es peligroso para la salud: a mayor obesidad, mayores riesgos para la salud. Entonces una mujer obesa debería preocuparse, porque su cuerpo contiene dos veces más de grasa que el de un hombre. Pero estudios demostraron que más que la cantidad total de grasa, es su localización la que define los riesgos para la salud.

Obesidad androide o ginoide: ¿cuál es más peligrosa?

En la obesidad androide la grasa se sitúa en profundidad, en el abdomen, cerca del hígado, del corazón y de los demás órganos vitales. Este tejido adiposo profundo es peligroso, libera grasas en las venas del abdomen, perturba el metabolismo del hígado así como la acción de una hormona clave para el equilibrio: “la insulina”. Ésta, es la parte no visible del enemigo tejido adiposo.

Nos podemos preguntar por qué la naturaleza ha previsto esta localización profunda de la grasa, ya que es peligrosa. La grasa profunda está rápidamente disponible para el organismo; cuando a este le falta energía, libera libera grasas para proporcionar energía a todas las células del cuerpo. Todo es cuestión de evolución.

El hombre en su evolución, tenía necesidad de esta reserva en caso de combate o huida. Al contrario, el tejido adiposo situado en los muslos y glúteos sólo se moviliza lentamente después de un esfuerzo o de un estrés. Se “reserva” para la necesidades del embarazo y del amamantamiento. Esta situación de la grasa corporal en la mujer se ve por tanto acentuada por la selección natural, maximizando así las posibilidades de perennidad de la especie humana.

Puede parecer exagerado pretender que el hombre ha sobrevivido y se ha multiplicado gracias a lo que algunos llaman hoy en día: “el trasero” .

¿ SE PUEDE ESCOGER LA SILUETA, TIPO MANZANA O PERA?

Existen tres factores que están fuera de nuestra voluntad; el sexo, la edad y la herencia. Un individuo mayor, de sexo masculino y que tiene padres de conformación “androide” tendrá más riesgo de ser androide que una persona joven, de sexo femenino y cuyos padres son más bien ginoides.

Pero el comportamiento interviene igualmente ¿por qué?

-Primeramente por la alimentación; las personas que comen muchas grasas (sobre todo saturadas) tienen tendencia a una silueta más androide que las personas que consumen pocas grasas.

-Segundo por la actividad física; su práctica regular reduce sobre todo la grasa situada en el vientre. Cuando se es fuerte y se tiene una silueta androide, el riesgo de complicaciones es importante, de ahí el interés del deporte, que hace adelgazar allí donde la grasa es más abundante. -Por otro lado, si se está estresado, el organismo fabrica y secreta hormonas corticoides (cortisol); éstas privilegian el aposentamiento del tejido graso en el vientre.

-El tabaco y el exceso de alcohol tienen el mismo efecto. No fumar, evitar los abusos de alcohol, contribuye a reducir la grasa corporal y todos sus riesgos.

Un “rayo de luz y esperanza” para todas aquellas personas robustas y con estructura androide: queman más calorías y adelgazan más fácilmente que aquellas cuyo exceso de grasa se concentra en la parte baja del cuerpo.

Tenemos dos buenas razones para adelgazar si nos sobra grasa a nivel abdominal:

  • es la MÁS PELIGROSA y
  • a la vez la más FÁCIL DE PERDER.

¿CÓMO PUEDO PERDER UN KILO DE GRASA?

Para perder 1 kilo de grasa deberemos quemar unas 7000 kilocalorías (kcal). Cada gramo de tejido adiposo humano contiene un 87% en grasa, mientras que el otro 13% corresponde a agua y otros sólidos no grasos.

Como cada gramo de grasa tiene unas 9 kcal, se puede decir que la “grasa pura” en un kilo de tejido adiposo equivale a unas 7000 kcal, por lo que para perder grasa deberás restar calorías a tu dieta y hacer ejercicio.

Ten en cuenta una cosa que al perder peso, no siempre se pierde SÓLO grasa. Al principio tu bajada de peso se deberá a la pérdida de agua, fluidos corporales u músculo esquelético. Deberás tener en cuenta que las personas´no perdemos al mismo ritmo la grasa; no perderá lo mismo una persona con obesidad, o sobrepeso que una persona delgada. En la etapa inicial perderá a un ritmo más rápido una mujer con obesidad, que una mujer más delgada o alguien que ha estado haciendo dieta durante varios meses.

La pérdida de peso rara vez es lineal, ni tan bonita como esperamos, por eso es necesaria la ayuda de un dietista-nutricionista que te asesore, controle y explique todos los cambios que van apareciendo medida que pierdes peso. Tu nutricionista te irá ajustando la ingesta calórica durante todas las etapas de pérdida de peso, además de añadir ejercicio físico para poder desarrollar masa magra, evitar su pérdida y poder aumentar el metabolismo.

Ejercicio para mantener la masa magra

Así que en resumen; a pesar de que una persona puede perder 1 kilo de peso muy rápido al comienzo de su dieta, para recortar 7000 kcal (y quemar así 1 kilo de grasa) va a ser necesario reducir aún más las calorías de su dieta durante varios periodos e incorporar otros cambios para continuar perdiendo grasa.

Perder un kilo de peso corporal, es DIFERENTE a perder un kilo de grasa.

Para evitar que se pierda tu masa magra en lugar de grasa, se recomienda una pérdida de peso lenta y constante lo que significa no perder más de un kilo a la semana.

RECUERDA:

Para perder peso y grasa, siempre debe generarse un déficit calórico, es decir, que las calorías que se ingieren sean menores a las que se queman y ayudarse de la práctica del ejercicio diario, para que a la vez se pueda mantener la musculatura, masa magra en perfecto estado.

Antes de ponerse “a dieta” y perder peso póngase en contacto con nosotras sus nutricionistas de Pamplona, Burgos, Palencia y Zamora que elaboraremos su menú saludable, midiendo su composición corporal, para conocer así su contenido en grasa corporal y lo más importante le ayudaremos a cambiar esos hábitos que le han hecho subir de peso, subir de grasa y que menguan su salud diariamente.

En este post termino con esta frase tan cierta:

Cuando la alimentación es mala,

la medicina no funciona.

Cuando la alimentación es buena,

la medicina no es necesaria”

FUENTES:

Nutrición saludable frente a la Obesidad. Bases científicas y aspectos dietéticos. J. Alfredo Martìnez. Catedrático de Nutrición. Universidad de Navarra.

Cómo perder peso sin hacerse la vida imposible. Guía para una dieta equilibrada. Dr. Jaques Fricker

Mis apuntes de Nutrición de Ciencia y Tecnología de los Alimentos.

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